Ahora tiene a sus ídolos a la par.
Ahora tiene a sus ídolos a la par
Hoy repasamos algunos detalles de la vida de otro gran futbolista que salió de la nada y actualmente es referente para jugadores de la zona de la CONCACAF y de todo el orbe. Hablamos de Alphonso Davies, recién proclamado campeón con el Bayer Múnich en el Mundial de Clubes 2021.
Davies pasó los primeros 5 años de su vida en un campamento de refugiados en Ghana y le tocó la difícil tarea de tener que cuidar a sus hermanos mientras sus papas trabajaban.
Siempre le gustó el fútbol y tenía sus ídolos. No muchas ocasiones podía ver un juego, era algo esporádico y no en un televisor en su casa, sino en las tiendas de electrodomésticos o en las afueras de algún restaurante. Hace un tiempo veía a sus ídolos por la TV, pero hoy los tiene a su lado o los enfrenta.
Alphonso Davies, canadiense, de origen liberiano, fue pieza clave del sextete recién conseguido por el Bayern Múnich. De él se dice que prácticamente vuela por la banda izquierda. Tiene apenas 20 años, ha disputado 68 partidos y ya ganó 8 títulos; sale campeón cada 8.5 partidos.
Por aquí le conocemos muy bien, hemos observado lo que hace con el Bayer alemán. Y estará con su selección en las próximas eliminatorias mundialistas. La dura infancia que tuvo y lo que se ha superado, provocan admiración y aplausos. Con esos ojos lo seguiremos viendo. Es un campeón, parece hecho para ganar, sus ocho importantes títulos lo certifican.
Periodista Marco Tulio Vega.
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El COVID mejoró las transmisiones televisivas de fútbol en España.
El COVID mejoró las transmisiones televisivas de fútbol en España
El público no ha dejado de estar presente
A raíz del COVID-19 y su impacto en todos los órdenes, las autoridades a cargo de las transmisiones por televisión de los partidos de “LaLiga” enfatizaron su apuesta por la innovación en las retransmisiones con nuevos puntos de vista y grafismos que ofrecen una experiencia más inmersiva al espectador, es decir, con una tecnología que intenta emular un mundo físico a través de un mundo digital o simulado, con lo cual no solo se ha logrado mantener sino incluso hacer crecer la emoción de siempre por parte del público, pese a las circunstancias de la pandemia.
Los avances y recursos son variados, pero es una parte técnica y tecnológica que no vamos a entrar a analizar. Lo que sí queremos es resaltar en esta nota que a raíz de los efectos y las restricciones provocadas por la pandemia, las transmisiones televisivas del fútbol español, son hoy muy superiores y mucho más extraordinarias, para beneplácito y beneficio del aficionado apegado a su deporte y a su equipo desde la pantalla.
Y es que todos los avances técnicos y tecnológicos puestos en operación desde la prohibición de ingreso al público en los estadios, han redundado en un salto de calidad en las retransmisiones, donde “LaLiga” ha tenido que hacer frente a desafíos inéditos. Uno de los más obvios ha sido esa ausencia de público en los estadios del fútbol profesional que, por mucho que la atención se centrara en la pelota, no dejaba de rodear a los encuentros de un ambiente muy diferente al habitual para todos, incluso para los mismos futbolistas.
En ese contexto de incertidumbre “LaLiga” tuvo claro que “un partido con el campo totalmente desierto, con esos sonidos de campo vacío, era totalmente contrario a lo que nosotros buscábamos”, ha señalado Roger Brosel, responsable de Contenidos y Programación de LaLiga.
Fue el inicio de una “carrera de fondo” que va camino ya de cumplir un año y en la que la solución para que el espectador “no se viera condicionado por ausencia de público y mantuviera una experiencia parecida a la de antes” fue la grada virtual, que dio colorido y animación a los últimos partidos de la pasada temporada y que sigue activa, también este curso, hasta que se normalice la situación sanitaria.
Se trata de un sistema que ‘viste’ las gradas para simular la presencia de público de cara al telespectador, como una ayuda para centrar su atención en el juego. La complejidad de hacer algo así en tiempo real conlleva un complejo desarrollo para adaptarse a todos los estadios de la categoría. Además, este complemento se añade al del audio, que para la retransmisión combina el sonido que se recoge sobre el césped con grabaciones de público real del mismo campo donde se juegue el partido. Así, por ejemplo, este público virtual puede reaccionar ante una ocasión fallada o gritar gol cuando toca. Aunque no haya espectadores in situ, no es esa la sensación que tendrá el espectador en su casa.
Para los futbolistas, jugar sin público, que es el que le da color a los días de partido, tampoco está resultando sencillo, como destaca el responsable de Contenidos y Programación de LaLiga. “Cuando el jugador marca un gol lo celebra con sus compañeros y luego va con su afición, normalmente. Por eso, nos dimos cuenta de que ahora se quedaba un poco a medias, sin nadie a quien dirigirse. Y ahí creímos que había una oportunidad de crear algo bueno para él y para la experiencia del espectador”.
Así nació la FanCam, una cámara específica situada en la grada y “marcada claramente” hacia la que “el goleador sabe que se puede dirigir para hacer su celebración para la gente, aunque esté al otro lado de la pantalla”. Es una idea aparentemente sencilla, pero más que efectiva para seguir conectando a los jugadores y a su afición y que, durante estos meses, ya ha dejado imágenes para una historia que, gracias a la tecnología, podemos sentir y vivir más cerca que nunca.
Periodista Marco Tulio Vega.
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La ciencia que une a LeBron James con la misión Perseverance.
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El autor estadounidense Nick Greene está por publicar How to Watch Basketball Like a Genius, un libro en el que profesionistas de todo tipo, desde coreógrafos de ballet hasta científicos planetarios, presentan ensayos sobre cómo entienden el básquetbol a partir de sus campos de estudio.
Para promocionarlo, el portal Inverse publicó un extracto del artículo en el que la geóloga planetaria Emily Lakdawalla compara al baloncesto, y en particular los pases y asistencias del astro de los Lakers de Los Ángeles LeBron James.
“Creo que los viajes interplanetarios se parecen mucho a los pases en el baloncesto”, sostiene la también divulgadora científica. Su comparación, profundiza Greene, conecta la visión de superestrellas como LeBron James para pasar el balón sin mirar al receptor con los cálculo realizados por los científicos para aterrizar un rover sobre la superficie de un planeta a cientos de millones de kilómetros.
“Cuando diseñas una trayectoria, estás contabilizando la velocidad, el movimiento y la trayectoria que la Tierra tiene como punto de partida”, explica la geóloga. “Cuando enviamos una misión a Marte, lo hacemos pensando en un sitio en el que aún no está, pero en el que estará cuando la nave llegue ahí. Eso mismo ocurre con las asistencias en el básquetbol, se trata de mandar el balón al sitio en el que estará el jugador, creo que es una analogía perfecta”, reflexiona.
El basquetbolista LeBron James es conocido por las asistencias que da a sus compañeros sin siquiera mirarlos. Algunos comentaristas deportivos dicen que esa magnífica capacidad viene de unos ojos invisibles que rodean su cara y que le otorgan una especie de mirada omnipresente. En la exploración espacial, esos múltiples ojos son las ciencias que hacen posible llevar objetos a otros mundos, como la misión Perseverance a Marte.
La científica apunta otra similitud que requiere precisión milimétrica: completar un pase y lograr un aterrizaje exitoso. En ambos casos juegan dos fuerzas de atracción sin las que sería completar uno u otro objetivo. En el caso del básquetbol, ese factor de atracción viene de las manos de los basquetbolistas; en la exploración espacial, la ejerce la fuerza gravitacional de cada planeta. “El momento en uno y otro debe ser perfecto, si falla, eso es todo”, remata Lakdawalla.
Periodista Marco Tulio Vega.